La extrema derecha no solo inventa, también es cómplice: la relación entre Trump, Musk y Diddy
Hace 8 años, en 2016, una cuenta de Twitter de contenido supremacista blanco, que decía pertenecer a un abogado de Nueva York, afirmó que el Departamento de Policía de la Ciudad de Nueva York había descubierto una red de abuso de menores vinculada al Partido Demócrata y a personajes como los Clinton. Según esta teoría, los abusos e incluso rituales satánicos se producirían en restaurantes vinculados a altos cargos demócratas, uno de ellos sería la pizzería Comet Ping Pong en Washington D.C. De ahí el nombre de la teoría conspirativa “Pizzagate”.
Calificar de pedófilo y satánico al Partido Demócrata siempre ha sido una estrategia muy utilizada por parte de grupos de extrema derecha como QAnon, seguidores de Trump. Los QAnon, creen que el mundo es gobernado por pedófilos que adoran al diablo, y que Trump es el único que puede salvarlos. Para los Conspiranoicos, considerados por el FBI como amenaza terrorista, los 34 delitos a los que ha sido condenado Donald Trump no son más que una estrategia para acabar con su carrera política y poner a Kamala Harris en el poder.
Más allá de las teorías de la conspiración, existe una certeza: Diddy y Trump eran amigos. El rapero, acusado de numerosas violaciones, trafico sexual y crimen organizado, entre otros delitos, mantendría una relación de amistad con el expresidente estadounidense. “Amo a Diddy, es un buen amigo mío, es un buen tipo” declaraba Donald Trump en el reality The Apprentice en 2012, en un video que se ha vuelto viral tras su publicación por The Daily Mail. En ese mismo programa, el multimillonario preguntaba a la cantante Aubrey O´ Day, quién había trabajado con el rapero, si este era “un buen tipo”, ella prefirió no responder. A diferencia de Kamala Harrys, Trump sí ha sido fotografiado con el cantante en varias ocasiones. En 1997, en la inauguración del restaurante de Diddy, en 1998, en el club de polo de Nueva York, en 2004, en una exposición de arte junto con Melania Trump, y en 2008 en una gala benéfica.
Las fotografías no demuestran que el político asistiera a las fiestas de Combs. Aun así, sumando su condena por abuso sexual y algunas polémicas declaraciones, como: “Puedes hacerles lo que quieras (a las mujeres) cuando eres una estrella", publicadas por el Washington Post, no es improbable que Trump estuviera al tanto o conociera lo sucedido.
Otro declarado “antiwoke” relacionado con el caso Diddy, es Elon Musk. En 2023, el propietario de X volvió a resucitar la teoría del “Pizzagate”, afirmando mediante un meme que todo era verídico.
Sean 'Diddy' Combs fue uno de los inversores iniciales de X. Es decir, el rapero habría apoyado económicamente al magnate tecnológico para hacerse con la red social. Tanto Musk como Trump han pasado de utilizar teorías de la conspiración con fines políticos a formar parte de ellas. Parece ser que, esta vez, los monstruos no están precisamente en el lado demócrata.
