Entrevista exclusiva a Jeremy Corbyn: “Los trabajadores tienen clase, no color”

Hablamos con el que fuese líder de la oposición y expresidente del Partido Laborista británico, ahora parlamentario independiente por el distrito electoral de Islington North, Jeremy Corbyn
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Encontramos al que fuese líder de la oposición y expresidente del Partido Laborista británico, Jeremy Corbyn, en Berlín en una conferencia por la paz organizada por la Fundación Rosa Luxemburgo. El ahora parlamentario independiente por el distrito electoral de Islington North ha dedicado toda su vida política a temas cruciales como el antirracismo, el antiimperialismo, los derechos LGTBIQ+, la protección del medio ambiente, el desarme y la defensa de los derechos humanos. Además, ha sido galardonado en varias ocasiones por su compromiso con la paz.

Explíquenos en qué consiste su proyecto Peace & Justice (Paz y Justicia), en nombre del cual acudió a la conferencia por la paz

Son más de 60,000 personas las que participan en el Proyecto de Paz y Justicia (Peace & Justice Project). Trabajamos con y apoyamos a los sindicatos en debates al respecto del nivel de vida, los conflictos salariales y los derechos sindicales. También coordinamos muchas organizaciones independientes de izquierda en todo el Reino Unido. Aún no es un partido, pero es un desarrollo que une a las personas. Estamos organizando el 14 de septiembre la segunda de nuestras conferencias internacionales y trabajamos para ello con la Fundación Rosa Luxemburgo y la Internacional Progresista, y será un encuentro físico que se podrá seguir en línea. Esperamos que unas 400 personas participen en la conferencia. Se trata de delinear alternativas a la guerra y a favor de la paz, sobre lo que también hablé en Berlín el pasado fin de semana. Esto incluye el desarme y la redistribución de recursos con fines sociales.

Acabamos de publicar un libro titulado Monstrous Anger of the Guns, que es un análisis de la industria armamentística y su poder de lobby, que corrompe la política en todos los países, pero especialmente en Europa y Estados Unidos. Tenemos un programa llamado Music for the Many. Hemos organizado una veintena de presentaciones musicales en todo el país y también sacamos otro libro titulado Poetry for the Many, que ahora está en su tercera edición y con él hemos organizado eventos de discusión sobre la imaginación, la historia y la poesía. Esto atrae a un nuevo grupo de personas al debate político y esperamos que desarrolle un espacio inclusivo y una voz para aquellos que en este momento no tienen hogar político.

En la cumbre de la OTAN en julio, se acordó el despliegue de misiles estadounidenses de largo alcance en Alemania. ¿Qué opina sobre este acuerdo?

Todos debemos entender que las alianzas militares que dominan el pensamiento político de Europa se derivan de la OTAN. El principal motor de la política exterior y económica ahora es que todos los países aumenten el gasto militar al menos al 2,5% del producto interno bruto. En el caso del Reino Unido, esto significa otros 30.000 millones de libras al año para armamento. Es un aumento semanal del gasto militar de 700 millones de libras. Al mismo tiempo, como en todos los países de Europa, se recortan los gastos sociales. Los acuerdos con Estados Unidos se realizan en parte a través de la OTAN, pero también en parte de forma directa, como en este caso con Alemania, en relación con el acceso a bases y personal militar.

Creo que los peligros de la creciente militarización de la economía y de las sociedades en Occidente son enormes. Pero también son grandes las oportunidades para las industrias armamentísticas en Rusia, India y China. Por lo tanto, existe una economía que se basa en la continuación de una guerra en Ucrania, que algún día deberá terminar mediante negociaciones

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En el Reino Unido, es la Ley de Fuerzas Visitantes de 1952, y ahora la Unión Europea, bajo la dirección de Ursula von der Leyen, también intenta desarrollarse como un bloque militar. Creo que los peligros de la creciente militarización de la economía y de las sociedades en Occidente son enormes. Pero también son grandes las oportunidades para las industrias armamentísticas en Rusia, India y China. Por lo tanto, existe una economía que se basa en la continuación de una guerra en Ucrania, que algún día deberá terminar mediante negociaciones. Y mientras, siguen otros conflictos como Palestina, Sudán, Congo y Yemen.

Y cuando hablamos de Gaza y Palestina, las armas se envían directamente desde Occidente...

Sí, exactamente. En el Proyecto Peace & Justice trabajamos estrechamente con la campaña de solidaridad con Palestina y muchas otras organizaciones en el Reino Unido, y hemos movilizado hasta un millón de personas en un momento dado para apoyar al pueblo palestino, exigiendo no solo un alto el fuego, sino también el fin del comercio de armas entre el Reino Unido y el gobierno israelí, así como la retirada de las fuerzas de ocupación israelíes tanto de Gaza como de Cisjordania. Las noticias de esta semana son terribles. Israel ha intensificado sus actividades militares en Cisjordania, y me parece que la extrema derecha en la política israelí está ganando terreno y quiere la anexión total de lo que reconocemos como Palestina.

¿Ve una conexión entre estas guerras y lo que está sucediendo actualmente en Venezuela?

Sí. Las conexiones radican en que la alianza de la OTAN, que se remonta a la conferencia de Lisboa en 2006, es decir, hace 18 años, decidió que la OTAN debería desempeñar un papel global. Por lo tanto, la participación de la OTAN en Afganistán se convirtió en la norma. La participación de la OTAN en la asesoría y actividades militares en todo el mundo, incluso en África Occidental, es enorme. Claramente, quieren atacar los símbolos de otro tipo de economía en América Latina. De ahí los ataques a Bolivia, a Perú cuando tuvo un presidente de izquierda, al presidente Lula en Brasil y, por supuesto, a Cuba y Venezuela. La pregunta es cómo organizamos la solidaridad contra esta expansión tanto económica como militar de Occidente.

¿Qué significa que el Gobierno alemán ahora esté devolviendo refugiados a Afganistán?

En general, los gobiernos europeos tienen un historial cada vez peor en cuanto a la gestión de todo lo relacionado con los refugiados y solicitantes de asilo. Los refugiados son víctimas de la guerra. Las personas en Calais que intentan cruzar el Canal de la Mancha para llegar al Reino Unido, las personas en Libia que intentan llegar a Italia, las personas en Turquía que intentan llegar a Grecia, son casi todas víctimas de la guerra o de catástrofes medioambientales. Las deportaciones que ahora han comenzado hacia Afganistán son extraordinarias. Afganistán no cumple con ninguno de los requisitos humanitarios globales: la Declaración Universal de los Derechos Humanos, la Convención de Ginebra de 1951 sobre el Estatuto de los Refugiados, las Convenciones sobre los Derechos del Niño, la Declaración de Pekín o la Convención de Estambul sobre los Derechos de las Mujeres.

Parece que hay una agenda muy racista en Europa occidental sobre quiénes son refugiados aceptables y quiénes no. Esto, por supuesto, alimenta el auge de la extrema derecha en Europa

No hay ninguna base legal para enviar a alguien de vuelta a Afganistán, a menos que sea simplemente un acto de agresión contra personas que desesperadamente buscan asilo. Con razón, los refugiados ucranianos han sido apoyados y acogidos en toda Europa occidental. Lo mismo no ocurre con los refugiados palestinos, afganos o personas que vienen de Libia, Siria u otras zonas de conflicto, incluyendo Eritrea, Etiopía y África Occidental. Parece que hay una agenda muy racista en Europa occidental sobre quiénes son refugiados aceptables y quiénes no. Esto, por supuesto, alimenta el auge de la extrema derecha en Europa.

¿Por qué hubo recientemente disturbios racistas en el Reino Unido y qué podemos hacer para detenerlos?

Los disturbios racistas fueron muy aterradores. Tres niños en una escuela de baile en el noroeste de Inglaterra, en un lugar llamado Southport, fueron asesinados. Las redes sociales afirmaron que la persona que cometió el asesinato era un solicitante de asilo. Pero en realidad era nacido en el Reino Unido. Esto no hace que el crimen sea menos grave, pero simplemente no es cierto que se trate de un solicitante de asilo. Eso llevó a que Tommy Robinson y su extrema derecha salieran a la calle y atacaran mezquitas, en particular a mujeres musulmanas que llevaban velo en la calle. Fue amargo, violento y feroz. La reacción del movimiento antirracista fue muy rápida y muy bien organizada. Organizamos manifestaciones contra el racismo en toda la región. Hablé el sábado siguiente en una manifestación de solidaridad frente a nuestra mezquita más grande. Fue enorme.

La extrema derecha no aborda las causas políticas de la pobreza. Intentan culpar a las minorías, como lo hicieron los nazis en Alemania en los años 20 y 30. Es importante una respuesta política de la izquierda

Pero no se trata solo de hablar en contra del racismo. Se trata de observar el terreno en el que la extrema derecha enciende su ira. Culpan a los refugiados por la falta de vivienda, por la falta de plazas escolares, por las listas de espera en los hospitales y los crecientes niveles de pobreza en las comunidades trabajadoras, donde la austeridad ha reducido su nivel de vida en un 20% en los últimos diez años. Al mismo tiempo, los ricos se han hecho más ricos. La extrema derecha no aborda las causas políticas de la pobreza. Intentan culpar a las minorías, como lo hicieron los nazis en Alemania en los años 20 y 30. Es importante una respuesta política de la izquierda: cuestionar el poder económico y la desigualdad en nuestra sociedad sobre la base de la solidaridad de la clase trabajadora. Los trabajadores tienen clase, no color. Son de todos los colores.

Eso es el capitalismo. ¿Ves una alternativa al capitalismo?

Sí, soy socialista. Por supuesto que hay una alternativa. Las demandas de una atención médica universal, vivienda y educación. El reconocimiento de que cada niño en la escuela es un ser humano valioso con la misma humanidad que todos nosotros y no una educación competitiva que descarta las ambiciones de un gran número de jóvenes de la clase trabajadora. Se trata de la clase. También se trata de la afiliación sindical y la propiedad pública de los servicios esenciales.

Muchas personas de izquierda en todo el mundo creen que Kamala Harris ahora es la alternativa en Estados Unidos. ¿Qué opinión le merece ese fenómeno?

Bueno, no soy seguidor de Trump ni admirador de los demócratas. Ellos son, de hecho, responsables de los ataques más terribles contra los refugiados e inmigrantes en Estados Unidos. Se han deportado más personas bajo Biden y Obama que bajo cualquier otro presidente: mexicanos, guatemaltecos y otros, de la clase trabajadora. Puedo entender por qué la derrota de Donald Trump es algo que me haría muy feliz, como a muchas otras personas, pero preferiría ver una alternativa mucho más fuerte para la clase trabajadora en Estados Unidos y no dos partidos empresariales que esencialmente transmiten el mismo mensaje económico.

¿Qué desafíos cree que enfrentará Claudia Sheinbaum en México?

Tiene enormes desafíos por delante. Fue una alcaldesa muy efectiva de la Ciudad de México. La conocí, tuve largas discusiones con ella y creo que continuará el camino de la justicia social en México. El partido MORENA ha logrado una enorme mayoría parlamentaria, así como una mayoría de votos a su favor. Tiene una organización nacional en cada pueblo y ciudad. Espero que se fortalezca aún más, pero sobre todo espero que desafíe los grotescos niveles de desigualdad en México. Se han hecho grandes avances, especialmente en educación y salud, pero México aún tiene un largo camino por recorrer.

Han pasado menos de dos meses desde las elecciones británicas. Todos estaban felices de que un gobierno conservador odiado haya desaparecido. ¿Cómo evalúas al nuevo gobierno laborista bajo Keir Starmer?

Me postulé por primera vez como independiente porque el Partido Laborista se negó a considerar mi nombre como candidato... y ganamos. Mi manifiesto electoral se centró en la abolición de las armas nucleares. Se trataba de la paz, del fin de la venta de armas a Israel, de la propiedad pública y la redistribución de la riqueza y el poder. Estos son principios que incluí en nuestro anterior programa electoral del Partido Laborista. Ganamos con el 50% de los votos en mi distrito electoral. Estoy muy orgulloso de este resultado.

Desde que asumió el cargo, el Gobierno ha prometido que habrá más medidas de austeridad y que aumentarán el gasto en defensa al 2,5%. No es un buen comienzo, y sospecho que esta será la fuente de un gran conflicto. Me gustaría sentarme aquí y decir que soy optimista. Desafortunadamente, no lo soy

Fue un resultado popular de personas que se comprometieron con la campaña. El resultado electoral nacional del Partido Laborista en estas elecciones fue más bajo que en 2019 y 3 millones menos que lo que logramos en 2017. Desde que asumió el cargo, el Gobierno ha prometido que habrá más medidas de austeridad y que aumentarán el gasto en defensa al 2,5%. No es un buen comienzo, y sospecho que esta será la fuente de un gran conflicto. Me gustaría sentarme aquí y decir que soy optimista. Desafortunadamente, no lo soy.


Entrevista realizada por Carmela Negrete y Phil Butland