Si España va a la guerra contra Yemen

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez (i) y el presidente de Estados Unidos, Joe Biden (d), en la reunión del Consejo del Atlántico Norte a nivel de Jefes de Estado y de Gobierno, durante la primera jornada de la Cumbre de la OTAN 2022 en el Recinto Ferial IFEMA MADRID, a 29 de junio de 2022, en Madrid (España). La Cumbre de la OTAN 2022 comienza oficialmente hoy y terminará mañana día 30 de junio. La celebración coincide con el 40 aniversario de la adhesión de España a la Organización del Tratado del Atlántico Norte. La invasión rusa de Ucrania, las tensiones entre Moscú y la Alianza y la adhesión de Finlandia y Suecia marcan la agenda de un evento en el que participan delegaciones de 40 países y que convierte a Madrid en el epicentro de la política mundial durante su celebración.
29 JUNIO 2022;CUMBRE;OTAN;DEFENSA;PAISES;POLITICA
EUROPA PRESS/E. Parra. POOL / Europa Press
(Foto de ARCHIVO)
29/6/2022
Pedro Sánchez y Joe Biden en la cumbre de la OTAN de Madrid — E. Parra. POOL / Europa Press
Si España va a la guerra con Yemen debería hablar el parlamento y es dudoso que Sánchez obtenga apoyos por la izquierda. Del mismo modo, Sumar quedaría en una posición comprometida

“Sánchez se abre a estudiar enviar oficiales de enlace a la misión de EEUU en el mar Rojo”. Así de ambiguo era el titular de esta mañana en la agencia Europa Press. En el digital de Pedro J. “El Español” eran menos ambiguos y decían sin ambages que “Defensa estudia participar en la operación contra los hutíes en el mar Rojo tras solicitárselo EEUU”. Permítanme que sea yo quien les proponga un titular: “Donde dije digo, digo Diego”, porque lo cierto es que el Gobierno se ha hartado en las dos últimas semanas de negar la participación de España en esta operación en defensa de los intereses israelíes, a pesar de que EEUU anunció su coalición internacional incluyendo en ella a España. En aquellos días el Gobierno llegó a desmentir a periódicos como La Vanguardia que señalaron lo inverosímil de que EEUU anunciase algo así sin que España lo supiera.

Pues bien, Pedro Sánchez admitió ayer que su gobierno va a estudiar la propuesta de EEUU de que participen oficiales de enlace españoles en la operación conocida como Guardian of Prosperity, de apoyo a Israel en el Mar Rojo. Según cuentan en El Español en la OTAN se daba por hecho que España iba a colaborar de una forma u otra en la operación y según altos mandos de la Alianza citados por el digital de Ramírez: “España no puede no participar. Hay muchas opciones para participar sin que parezca que se hace. Otra cosa es que por cuestiones políticas se disfrace de algún modo". Ya ven que en esto de las guerras la mentira está absolutamente normalizada entre los militares y los periodistas. Vamos a la guerra pero procuremos que no se nos note mucho.

Ya ven que en esto de las guerras la mentira está absolutamente normalizada entre los militares y los periodistas. Vamos a la guerra pero procuremos que no se nos note mucho

Hace solo dos días, en plenos bombardeos contra Yemen, la titular de defensa Margarita Robles negaba que se fuera a dar ningún tipo de colaboración, pero la presión de EEUU no ha cesado en ningún momento. Como contamos en Diario Red la semana pasada  el jefe del Estado Mayor Conjunto estadounidense, el general Charles Brown, llamó por teléfono al JEMAD español, el almirante Teodoro López Calderón, para insistirle en la importancia de que España participara. Y parece que la presión está dando sus frutos.

En “El español” señalan además una cuestión muy interesante. Explican que los jefes de la OTAN entienden perfectamente que al gobierno español no le interese reconocer que apoya y participa en una misión dirigida por EEUU de apoyo abierto a Israel, teniendo en cuenta las diferencias en el seno del propio gobierno a la hora de abordar este punto de la política exterior.

Si España va a la guerra con Yemen debería hablar el parlamento y es dudoso que Sánchez obtenga apoyos por la izquierda. Del mismo modo, Sumar quedaría en una posición comprometida. Una cosa es tragar los sapos de la política exterior de Sánchez, como ocurre con Marruecos, y otra bien distinta es asumir ir a la guerra en defensa de Israel. Veremos si lo de los “oficiales de enlace” dando apoyo logístico les vale o no para disimular lo que, a todas luces, sería participar en una guerra poco presentable.

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