Jarabe de cloaca

Nacho Abad como paradigma del periodismo que no funciona, que ya no cuela

Mi jefe es anormal.

Lo digo así de saque por si os preguntáis por qué siempre sale en mis textos, de una u otra manera.

Me deja a mi bola, no se inmiscuye en nada, cada tres meses me invita a paella (aunque le eche alcachofas de bote), y cuando propone algo y le dices que no procede, te contesta: —Tienes razón.

Es anormal. No es avaro como otros que he conocido y cuando te ve te da un abrazo sincero y te pregunta: —¿Qué tal vas bonito?

No le conozco mucho porque está muy ocupado (quiere poner un Garibaldi en Siberia), pero me da buena vibra este muchacho.

Nada de esto sería posible sin suscriptores

Seguro que le podemos (no he elegido el verbo al azar) achacar mil errores en los últimos años pero si miro la lista de los míos se cuadriplica…

Todo este preámbulo innecesario para hablar de su conexión en directo (o lo que los modernos llaman “dúplex” ) en Cuatro con Nacho Abad.

Detecto por la voz y por el rostro que Pablo Iglesias Turrión (a partir de ahora PIT) ha pasado una noche zamorana (otro gentilicio no elegido al azar). Seguro que los niñxs se han despertado a las seis de la mañana con ganas de meterse en la piscina.

Yo también lo hubiera hecho.

No creo que haya estado hasta las cinco de la madrugada viendo The House of Dragon porque ya me avisó que no le cameló la primera temporada.

Tampoco creo que estuviera hasta las tantas hablando con Echenique de las campañas del general San Martín, de los vericuetos estratégicos de Simón Bolívar, del grosor de los cuadernos y el tipo de hoja que usaba Fidel en Sierra Maestra o de las derivaciones del asma de Ernesto Guevara de la Serna.

Aunque todo es posible.

Al ver el tuit que puso PIT me temí lo peor, o lo mejor: —Juzguen ustedes mismos, decía.

Pensé: —Este tío dormido le da sopas con honda al abad del convento.

Y así fue.

Les sitúo la escena.

La jueza Belén Pérez absuelve a Miguel Frontera. Oh sorpresa. España 2024 el aceite de oliva por las nubes, la judicatura por los suelos.

Franco ha sido descuartizado en Mingorrubio y se han distribuido sus partes nobles y menos nobles por juzgados, audiencias nacionales y tribunales.

A Frontera le ha tocado el huevo incorrupto del genocida.

Siete meses de empleo y sueldo dedicados a dar por saco junto al hogar de Irene, Pablo, Manu, Leo y Aitana.

Sabía bien lo que hacía y las consecuencias que no tendría. Atado y bien atado.

El programa de Cuatro lanza un vídeo con los hits de Frontera. El presentador (con media sonrisa dibujada en la cara) se solidariza a su manera con las víctimas.

Pero yo sé lo que pasó allí y la jueza debería haberlo sabido. Solo tenía que preguntar a la gente que estuvo en esa calle tratando de proteger a los hijos e hija de Irene y Pablo. Ratas voladoras, gritos a las tantas de la madrugada, insultos constantes.

Tendría que haber llamado a declarar a Miguel Ángel, Ana, Nacho (no Abad, otro), Aurora, Domingo, Alicia, Eduardo, Amparo, Leandro, Mercedes, Paco…

Pero entonces estaríamos en otro país. El derecho natural no sería una utopía.

Igual algún año de estos se les puede hacer un Nuremberg a los jueces, como se hizo en su día. Nunca está de más.

Como decía el tango “Balada para un loco” en voz del polaco Goyeneche: —Volá conmigo ya. Vení, volá, vení.

Nacho Abad iba tejiendo toda una red de buen rollismo para sacarse de la manga la traca final. Que, por cierto, le explotó en la cara. Sorry por el spoiler.

—Date por jodido, pensé.

El abad del convento considera que fue brutal el acoso y bla bla bla. Iglesias está con la escopeta cargada porque sabe lo que viene después. La retahíla de tópicos sacados del cajón de sastre de Steve Bannon de todos Losantos.

Un “pero” como un misil de Netanyahu sobre un hospital de Gaza se cierne sobre PIT.

Es un meteorito que siempre les cae a los mismos. Caen tantos y en los mismos lugares que ya raya el ridículo y el terraplanismo comunicativo.

—Ya, vale… le acosaron en su casa pero usted mató a Manolete.

—Yo no había nacido cuando Islero mató a Manolete.

—Puede ser, habría que verlo pero ¿se arrepiente de haber pensado en algún momento de su vida que si hubiera estado en esa plaza de toros de Linares le hubiera matado usted mismo con sus propias manos?

—Nunca he pensado en matar a Manolete, ni en sueños. Soy más de vive y deja vivir.

—Ya pero ¿tiene algún amigo que le haya comentado alguna vez la posibilidad de haber querido meterse en la piel de Islero y matar a Manolete.

—Yo he venido aquí a hablar de Frontera.

—Ya, pero ¿si usted hubiera vivido en aquella época se hubiera enrollado con Lupe Sino para hacerle la vida imposible a Manolete?

—En todo caso hubiera tenido un desliz amoroso con Simone Weil.

—No sé quién es Simone Weil.

—Formó parte de la Columna Durruti y ayudó en la resistencia francesa.

—¡No sé de qué resistencia me habla! No se vaya por los cerros de Úbeda. ¿Se arrepiente de no haberle dedicado ni un minuto de su vida a pensar en la terrible muerte del maestro Manolete?

En fin. Si no sabes torear… ¿pa qué te metes?

Y cómo no… Nacho Abad sacó la carta del jarabe democrático a Cristina Cifuentes.

¡Qué perra tienen con ese término! Lo repiten una y otra vez como si fuera una consigna esculpida en piedra en el frontispicio de El Yunque.

Es el Santo y seña de toda una generación de fachas.

Si lo utilizas en cualquier conversación random diez veces al mes te convalidan el doctorado en periodismo patrio y de las JONS.

¿Santo y seña?:

—¿Qué llevo aquí colgado?

—El jarabe democrático de Galapangrado.

Nacho Abad comparó, en este delirio en directo llamado programa, un día de escrache a la entonces presidenta de la Comunidad de Madrid con siete meses de acoso diario a una casa (con lanzamiento de ratas muertas a lxs niñxs incluido).

Nacho Abad no repara en que PIT no estuvo en el escrache.

—Yo no estuve allí.

—Jarabe democrático.

—Nunca estuve allí.

—Jarabe democrático

El único jarabe democrático estaba dentro de las cremas que robó en el Eroski.

Al menos ya paró con Manolete.

Nacho Abad confunde que gente de la PAH (que ha perdido o está a punto de perder su casa y quedarse en la puta calle) le pida a un político que deje de hacer leyes para los bancos y los fondos buitre con un ataque ultra de un montón de gente amenazando a rojos por ser rojos.

Cosa que por cierto les va a hacer más rojos. Sorpresas te da la vida.

Nacho Abad se molesta cuando PIT le dice que tiene “pocas entendederas”.

—Me ha llamado usted tonto.

Y sí, y en tu propia cara, en tu propia cadena.

Con la calma y la sonrisa del que sabe que tiene razón. No en lo de tonto (que lo desconozco, o no) pero sí en lo de las entendederas.

Chico no te enteras de nada. Compañeros y compañeras de Atresmedia, Mediaset y demás… liberaos de las cadenas (caenas) y salid al mundo libre. Os confieso que hace mucho frío, pero se duerme mejor.

El señor Abad habla de la pluralidad de Cuatro. Iglesias le recuerda que ese canal echó a Jesús Cintora.

—Este jodido PIT está rápido para estar medio sopa, pienso.

Abad se queda en blanco. Blanco Florentino. Carraspea y suelta un (esta vez sí) tonto: —La gente va y viene de los trabajos.

Claro, Assange sale y entra de la cárcel porque es un parque temático. Pablo González se ha ido a vivir a una celda de una cárcel en Polonia para escribir una novela negra sobre la cautiverio en plena UE.

Ricardo Ortega murió tras comer un arroz con frijoles en mal estado en Haití.

José Couso se tropezó con el trípode y cayó por el balcón de su habitación en el Hotel Palestina.

Todas sabemos por qué Cintora no está en Cuatro, por qué Cintora salió a toda prisa de TVE. Pastores de la cloaca S.A.

Abad sigue don erre que erre buscando que el próximo dueño de la Funeraria Atea Iglesias S.L. se arrepienta de algo.

En el fondo quiere que se arrepienta de haber nacido, de haberse presentado a las europeas en 2014, de haber casi dado el sorpasso en 2016, de que su madre no tenga un paraíso fiscal en Granadinas o en Chafarinas, que su perro Tirso se coma el tiramisú cuando alguien descuida la mesa, que su compañera Irene no sea todavía cajera del Simago y que no siga en pie el FRAP para acusarle de tener un padre terrorista.

Y así todo.

Como ya llevaba dos cornadas severas al presentador no se le ocurre otra cosa que preguntar: —¿Se arrepiente usted de haber elegido a Yolanda Díaz como sucesora?

Fijaos la que ha liado el tipo para intentar arrinconar a PIT. Tirando ya de la feria del pueblo. La chochona, tenemos la chochona. El premio gordo de la mañana.

Parece como si Abad hubiera llamado a la jueza Pérez para decirle que dejara sin cargos a Frontera para poder tener la excusa de llamar a PIT y ponerle entre la espada y la pared.

Lo que pasa es que la espada la llevaba Pablo Stark y la pared la tenía delante y detrás Nacho Lannister. Paga lo que debes.

Iglesias somnoliento le ha dejado (y perdonad el símil taurino) con media estocada. Ahora vuelves a por otra, amigo.

Que si quieres arroz catalina. La ley de la Frontera: A ti te absuelven y tu esbirro ni se entera.

Y este es el nivel. Podemos como punching bag, PIT como piñata de la cloaca.

Canal RED tiene a sus becarios remando en la orilla, en las galeras de un buque fantasma en pleno limo del río Manzanares.

Irene Montero hace vídeos desde Bruselas sin una pértiga y el sonido no es todo lo bueno que debería. ¡Montero dimisión!

Lo pide esta gente que no ha pisado un desahucio a las cinco de la madrugada en su puñetera vida.

Esta gente que no ha escuchado de cerca (ni de lejos) los testimonios de niñas palestinas hablando de cómo sus primas en Gaza están enterradas bajo los escombros.

Si la mitad de veces que dicen “vosotros matasteis a Manolete” dijeran “genocidio en Gaza” otro gallo cantaría, y sería el gallo rojo.

Esta gente se queda en la superficie. Son monos y monas de repetición.

Quintana Griso que estás en los cielos. Y estos no los vamos a asaltar.

Jarabe de escrache democrático.

Jarabe de esperanza (Aguirre) democrático.

Jarabe de palo fascista para los 6 de Zaragoza, para los 6 de la Suiza, para los tropocientos que estamos en lista de espera para ser fusilados.

Nos la soplan vuestras fronteras.

Como diría Van Gaal: —Es usted muy malo.

Por eso me gustó tanto ver a mi jefe sonreír sin dejar de repartir mandobles. Siempre se lo digo… con la ironía y con el humor se pueden hacer muchas cosas.

Los catalanes hacen cosas.

Miradme a mi… que desde que escribí el artículo “Eternamente Yolanda” me paso el día buscando una bomba lapa en los bajos de mi coche.

No veas cómo agitó el avispero centrista reformista cuqui guay del Paraguay ese texto, que en el fondo era un espejo, una piñata de realidad que escuece. Matad al mensajero.

Hubo gente que se lo tuvo que leer varias veces porque no entendía de dónde venía tanta indignación.

Fijaos que hay gente que se ha enfadado incluso por un texto que ni he publicado. Viva la libertad de prensa y viva el humor.

Están a la defensiva porque les ponemos espejos. Espejitos.

Nacho Abad como paradigma del periodismo que no funciona, que ya no cuela.

La próxima vez que despertéis a mi jefe que sea para algo más sensato, por favor. Que luego viene al curro y no le puedes preguntar ni por el papel de Escocia en la Eurocopa. Que este tío vivió en Edimburgo. Seguro que eso Nacho Abad no lo sabe.

Porque Nacho Abad fue a por lana y salió trasquilado.

Esto me recuerda a que el otro día una amiga me dijo que tiene una amiga peluquera. Hasta ahí todo bien.

La amiga está indignada porque hay un director de un medio “de izquierdas” que siempre se corta el pelo ahí y se va sin pagar. Todo mal.

Además también se llama Nacho. “Toma chocolate, paga lo que debes”, como decía el gran Nat King Cole.

Y no mates a Manolete, ni al mensajero.

Simplemente, no mates.