Alberto Garzón abandona la vida política destacando que IU resistió a la irrupción de Podemos en 2015
El coordinador federal de Izquierda Unida y ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha remitido una carta a los militantes de su formación política para anunciar “un paso al lado” de sus responsabilidades orgánicas después de que en junio comunicara que no repetiría ni como diputado ni como ministro.
“Se trata de una decisión muy meditada y que formaba parte de la hoja de ruta que personalmente asumí hace tiempo. He esperado este momento para sincronizar mi decisión final con el cambio de fase política”, explica Garzón en su misiva.
Garzón, que fue elegido diputado de IU en 2011 cuando sólo contaba con 26 años, narra en su carta que su formación política ha vivido tiempos “muy difíciles” y que ha visto el “abismo” muchas veces durante estos “largos e intensos” años.
El todavía ministro de Consumo reconoce que el 15M puso a IU en un “inmenso aprieto” porque su formación política “encarnaba en gran medida los valores y principios que querían abrirse paso en nuestra sociedad, sobre todo en las generaciones más jóvenes, pero no éramos nosotros quienes rentabilizábamos electoralmente esas nuevas aspiraciones”.
El político malagueño, que entró en política de la mano del economista Juan Torres, quien lo apadrinó ante la dirección de IU y de que se distanció al poco tiempo de llegar al Congreso, recalca que IU, a la que define metafóricamente como una “tripulación de marineros y marineras”, ha tenido que ser “reparada con menos recursos y más dificultades que otras embarcaciones que, además parecían ser siempre mucho más atractivas y poderosas”, en referencia a Podemos.
Sobre la irrupción de Podemos, que supuso que IU obtuviera sólo dos diputados en el Congreso y un millón de votos en las elecciones de 2015, Garzón subraya que “muchos hubieran querido que fueran las últimas elecciones para IU”.
Después de las elecciones generales de 2015, donde IU a punto estuvo de desaparecer mientras que Podemos obtuvo 69 diputados y más de cinco millones de votos, el entonces secretario general de los morados, Pablo Iglesias, cerró con el líder de IU, el 9 de mayo de 2016, el ‘pacto de los botellines’ para la conformación de Unidas Podemos, en contra del sector errejonista que veía en IU una lacra por su vinculación con el Partido Comunista que amenazaba con la ruptura de la transversalidad de los morados.
En las elecciones generales de 2015, IU estuvo a punto de desaparecer mientras que Podemos obtuvo 69 diputados y más de cinco millones de votos
La animadversión del errejonismo con IU, que le costó a Podemos la escisión, tuvo como episodios claves la expulsión del Gobierno municipal de Madrid, que lideraba la exalcaldesa Manuela Carmena, de líderes de Izquierda Unida, como el exconcejal de Economía Carlos Sánchez Mato, a quien Carmena sacrificó para no oponerse a las reglas de austeridad del ministro de Economía de Mariano Rajoy, Cristóbal Montoro.
Años después, Garzón rompió la alianza con los morados que dio lugar al nacimiento de Unidas Podemos para aliarse en Andalucía con el sector errejonista y conformar Por Andalucía, vetando al candidato de Podemos, Juan Antonio Delgado, que fue votado en unas primarias donde participaron más de 6.000 militantes de Podemos.
La conformación de la coalición ‘Por Andalucía’, con empujones al candidato de Podemos en la Feria de Abril de Sevilla para que no apareciese en la foto con Yolanda Díaz —que había ido a Sevilla a designar como candidata a la apuesta de IU, Inmaculada Nieto—, fue el primer episodio de lo que luego ha sido Sumar, donde el todavía ministro de Consumo es el principal apoyo de Yolanda Díaz, de quien se llegó a distanciar en 2019 cuando IU defendía que Podemos tenía que dar sus votos al PSOE y pasar a la oposición en contra de las tesis de de Pablo Iglesias.
Los morados defendieron, en contra de IU, Más Madrid o Compromís, la conformación de un gobierno de coalición con el PSOE, como así fue tras la repetición electoral provocada en noviembre de 2019, del que finalmente Garzón acabó siendo ministro de Consumo. Garzón cierra su carta manifestando que seguirá haciendo política con “tantas herramientas como pueda” para “seguir contribuyendo a construir una sociedad ecosocialista: el único freno viable y democrático ante el avance de la barbarie y la destrucción ambiental”.
