El Gobierno de Sánchez selló contratos con empresas de armas israelíes en pleno genocidio en Gaza
Israel continúa a día de hoy perpetrando el genocidio planificado en Gaza y superando ya los 40.000 asesinados, la mayoría mujeres y niños, durante los últimos diez meses. Sin embargo, la continuación de la masacre por parte de Netanyahu no ha supuesto un obstáculo para que el Gobierno de Sánchez haya firmado contratos en agosto con empresas contratistas del Ejército de Israel.
El día 16 de este mes, según informa Danilo Albín en Público, la Jefatura de Asuntos Económicos del Mando de Apoyo Logístico del Ministerio de Defensa que lidera Margarita Robles, “adjudicó a la empresa israelí Netline Communications Technologies (NCT) el contrato para la adquisición de equipos de sincronización de inhibidores de frecuencia. El importe de la adjudicación alcanzó los 471.900 euros”. Pero no ha sido este el único contrato. El 12 de agosto, cuatro días antes, tuvo lugar otro con la empresa Elbit Systems del servicio “para el mantenimiento del mortero Cardom”. Esta empresa ya recibió otro 897.304 euros para mantenimiento y repuestos de radioenlaces.
Estas no son las únicas operaciones de compra que ha hecho España. En julio de este año, el Centre Delàs de Estudios por la Paz ya informaba que “desde octubre de 2023, se han adjudicado contratos públicos para equipar a las fuerzas armadas a empresas de seguridad y defensa israelíes o sus filiales en España por valor de 1.027 millones de euros”. Entre los materiales adquiridos “destacan el sistema de lanzacohetes SILAM (consorcio con Elbit) o los misiles SPIKE (PAP Tecnos, filial de Rafael), ambos publicitados como “probados en combate””.
Hay que recordar que el 10 de abril, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, afirmó en sede parlamentaria a preguntas de Gabriel Rufián “desde el 7 de octubre España no desarrolla ninguna operación de compraventa de armas con Israel, ninguna”. Esta afirmación se ha demostrado falsa en ambos sentidos ya que como se viene demostrando la compra por parte de España no se ha detenido desde que comenzara la masacre. Por otro lado, como ya también informó esta misma entidad pacifista, en noviembre de 2023 “se exportaron bienes de la categoría 93 por un valor de 987.000 euros”. Tales bienes corresponderían a “bombas, granadas, torpedos, minas, misiles, cartuchos y demás municiones y proyectiles, y sus partes, incluidas las postas, perdigones y tacos para cartuchos”.
El investigador de Centre Delàs y coautor del informe Business as usual. Análisis del comercio de armas español de 2022-23 y argumentos para un embargo de armas a Israel, Eduardo Melero, apuntaba ya entonces que “si en una situación tan excepcional como la de Gaza, el Gobierno no aplica la legislación para parar el comercio de armamento con Israel, deberíamos preguntarnos para qué sirve esta normativa. Hasta ahora únicamente para legitimar la política de fomento de exportaciones de armamento del Gobierno y para dar seguridad jurídica a las empresas exportadoras. Es evidente que la protección de los Derechos Humanos no está en la agenda del Gobierno”.
