Puente ocultó que la República Checa puede re-exportar a Israel las armas que transporta el Borkum, según el certificado al que él mismo se refirió

Se vuelve obligatorio tomar acciones contra el buque Borkum por existir los indicios racionales que figuran en la ley 53/2007

Durante las últimas horas y para contrarrestar la petición de organizaciones de la sociedad civil, partidos de izquierdas como Podemos y hasta de la relatora especial de la ONU para Palestina de inmovilizar e inspeccionar el carguero Borkum por existir indicios racionales de que pudiera estar transportando armas cuyo destino final fuese Israel, para su utilización en el genocidio contra el pueblo palestino, el ministro de Transportes Oscar Puente ha acusado a todas estas voces de mentir y de intentar manipular a la opinión pública con un tema muy delicado.

Uno de los argumentos de peso que ha utilizado el ministro del PSOE para descargar sus ataques contra las voces críticas, tanto en la televisión como en las redes sociales, es que se encuentra en su poder un certificado de uso final expedido por el gobierno de la República Checa en el que éste declararía ser el usuario final de las armas, que serían utilizadas para su propia defensa.

Esto encaja con dificultad si tenemos en cuenta, por un lado, el hecho de que la documentación filtrada sobre la carga del Borkum incluye una cláusula de confidencialidad que impide a la tripulación comentar con nadie nada que tenga que ver con la empresa IMI Systems —una compañía con financiación público-privada subsidiaria de Elbit Systems, el gigante armamentístico de Israel— o con el nombre del propio Estado sionista en relación con la carga del buque, así como, por otro lado, con el hecho de que la República Checa es uno de los máximos exportadores europeos de armas a Israel y que, según denuncia el movimiento BDS, la práctica de ofuscar documentalmente el destino final de las armas es práctica habitual en el caso de Israel.

Por si esto fuera poco, Diario Red acaba de tener acceso al certificado emitido por la República Checa al que se ha referido Puente y, en su punto 2.b, se puede leer explícitamente que dicho país no podrá re-exportar el material militar a otros países si no cuenta con la autorización del gobierno exportador. Es decir, que la República Checa podría perfectamente re-exportar las armas a Israel sin más que solicitar y recibir la correspondiente autorización por parte del gobierno de la India.

En los últimos minutos, además, hemos conocido que el ministerio de Transportes ha denegado la escala en el puerto de Cartagena a otro buque diferente al Borkum —el carguero danés ‘Marianne Danica'— por dirigirse directamente al puerto israelí de Haifa. No solamente estamos ante la primera vez en la cual el gobierno de España lleva a cabo una actuación como esta, sino que además el carguero danés sospechosamente proviene también de la India.

Nada de esto sería posible sin suscriptores

Con todos estos elementos encima de la mesa, no solamente se vuelve obligatorio tomar acciones contra el buque Borkum por existir los indicios racionales que figuran en la ley 53/2007 sino que, además, habría que empezar a valorar la posibilidad de exigir responsabilidades políticas ante lo que, a todas luces, parece un intento de engaño a la población para facilitar que lleguen armas a Israel para que éstas puedan ser usadas en el exterminio del pueblo palestino.