Carlos Herrera, en ABC: "Estoy seguro de que Juan Carlos I ha sentido la muerte de Kissinger”

El periodista de la radio de los obispos asegura que el criminal de guerra fue “un buen amigo de España”
(I-D) El periodista de la COPE Carlos Herrera, y el expresidente del Gobierno Mariano Rajoy, durante la presentación del libro de Rajoy, "Una España Mejor", en la Fundación Rafael del Pino, en Madrid a 4 de diciembre de 2019.
04 diciembre 2019, Publicación, Libro, Político, Expresidente del Gobierno, Partido Popular, PP, Periodismo, COPE, Herrera en COPE 
Jesús Hellín / Europa Press
(Foto de ARCHIVO)
04/12/2019
Carlos Herrera junto a Mariano Rajoy — Jesús Hellín / Europa Press

El periodista estrella de las mañanas de la COPE, Carlos Herrera, ha publicado una tribuna en ABC a modo de obituario del ex secretario de Estado de EEUU Henry Kissinger, fallecido este jueves a los 100 años. En el artículo que firma Herrera repasa la relación que éste tuvo con el rey emérito Juan Carlos I. 

Durante un viaje de Juan Carlos de Borbón a Estados Unidos, Kissinger, según Herrera, le dijo: “Yo le aconsejo que mantenga usted el orden y la estabilidad en su país. De nada le servirán las reformas si no hay seguridad en las calles. Aplique las leyes y luego cambie usted todo lo que quiera”. 

El periodista de la radio de los obispos españoles apunta que Kissinger, considerado un criminal de guerra por su papel protagonistas en el derrocamiento de regímenes democráticos y en el impulso de golpes de Estado y dictaduras militares en varios países de América Latina, fue “un buen amigo de España que aconsejó siempre con prudencia al Rey, a quien ayudó en algunas determinadas gestiones cuando Franco vivía”. 

Todo esto lleva a pensar a Carlos Herrera que el rey emérito, autoexiliado en Abu Dabi por sus escándalos de corrupción, ha “sentido” la muerte de Henry Kissinger, a quien el periodista define como “una de las cabezas más lúcidas de la política del siglo” y a su papel en los golpes de Estado de América Latina, como en Chile en 1973 contra el presidente Salvador Allende, lo considera “tejemanejes en el ‘patio trasero’, entiéndase Iberoamérica”. 

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