Ana Redondo no cesa a Isabel García tras conocerse que habría facturado hasta 250.000 euros con 64 contratos a dedo

La ministra pide “tiempo” para la directora del Instituto de las Mujeres, quien asegura que sigue teniendo un 8% de las empresas y que “ha hecho las cosas bien”

EuropaPress_5773192_directora_instituto_mujeres_isabel_garcia_interviene_presentacion_20 Gustavo Valiente / Europa Press
Gustavo Valiente / Europa Press

Esta semana se ha conocido que la directora del Instituto de las Mujeres, Isabel García, junto a su mujer, Elisabeth García —exasesora del PSOE en el Senado—, habrían obtenido, a través de empresas vinculadas a ellas, un total de 64 contratos a dedo para los puntos violeta, facturando hasta 250.000 euros, según ha informado El Español.

Esta misma mañana, la ministra de Igualdad Ana Redondo, al ser preguntada por la continuidad de García, ha pedido “tiempo” para esta. “Hay que darle tiempo y permitirle que dé las explicaciones que considere y eso es lo que vamos a hacer, que ofrezca todo tipo de información que aclare esta cuestión”.

Tanto colectivos trans como la exministra de Igualdad, Irene Montero, han pedido el cese de la directora, una reclamación que no viene sólo por este supuesto caso de corrupción, sino por los comentarios tránsfobos vertidos por García en sus redes.

Con “la conciencia tranquila”

En un comunicado lanzado esta misma mañana a través de su cuenta de X, Isabel García se ha defendido de estas informaciones. Asegura que en 2022, cuando ya no tenía ningún tipo responsabilidad dentro del PSOE, constituyó una consultora de igualdad junto a su mujer. Así, señala que en 2023 se habría puesto en contacto con la Oficina de Conflicto de Intereses y que entonces decidió mantener a su nombre un 8% de las empresas. Además, afirma que ninguna de las empresas que ahora gestiona su mujer “ha recibido un solo contrato del Instituto de las Mujeres”.

Con esta explicación, García sostiene que tiene “la conciencia tranquila y la certeza de haber hecho las cosas bien”. También ha querido agradecer a sus compañeros y compañeras del Ministerio de Igualdad “por el apoyo durante estos ocho meses”.

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Así pues, la directora ha exigido una rectificación al periódico, asegurando que está estudiando tomar acciones legales contra él al estar en juego su “integridad y honorabilidad”.

Supuestos contratos a dedo

Según El Español, García aprovechó su cargo en el Instituto de las Mujeres, que ocupa desde el pasado 27 de diciembre, para que las empresas vinculadas a ella y su mujer, Elig Consultoría de Igualdad y Diversidad e IMBER Consultoría de Igualdad, se beneficiaran de contratos menores en ayuntamientos de municipios gobernados por el PSOE para los Puntos Violeta.

Para conseguir los contratos, el modus operandi era presentarse al concurso sólo tres empresas para asegurarse que ganaban los contratos. Así, la empresa Afianza Global Service SL de María Tato —directiva de la Real Federación Española de Fútbol y miembro del Comité Ejecutivo del Mundial 2030—, se habría presentado para simular ser una empresa competidora, aunque estaría todo pactado con anterioridad.

La empresa de Tato se presentó para concurrir por dos licitaciones en el Ayuntamiento de San Fernando de Henares (Madrid) —gobernado por el PSOE— con la finalidad de proporcionar “materiales divulgativos y publicitarios para la campaña de las jornadas 8-M” en marzo de este mismo año. En este caso, consiguió la licitación la empresa Elig Consultoría de Igualdad y Diversidad S.L por 5.050 euros. La segunda adjudicación habría sido hace tan sólo dos meses, en mayo, y que en este caso fue a parar a IMBER Consultoría de Igualdad para gestionar los Puntos Violeta de las fiestas patronales.

A este municipio se sumarían otros contratos menores en ayuntamientos de poblaciones valencianas como Catarroja, Picanya, Burjassot, Moncada, Manises, Sueca, Godella, L'Eliana, Burjassot, Alcàsser, La Vall d'Uixó, Cullera, Alaquàs, Llíria y Foios.

“Las mujeres trans no existen”: Isabel García y sus comentarios tránsfobos

Más allá de este supuesto caso de contratos a dedo, su nombramiento como la nueva directora del Instituto de las Mujeres el pasado mes de diciembre estuvo envuelto de polémica por su abierta transfobia compartida a través de sus redes sociales. En algunos de los tweets, García llegó a asegurar que “la teoría queer avanza sin descanso con el único objetivo de perpetuar el heteropatriarcado y borrar a las mujeres de lo político”, que “las mujeres trans no existen” y que “las mujeres transexuales son mujeres transexuales y punto”.

Después de su nombramiento, la Federación Plataforma por los Derechos Trans y Euforia Familias Trans-aliadas anunciaron la presentación de un recurso contencioso-administrativo contra elección de García.

Pese a estos comentarios, la ministra de Igualdad defendió el nombramiento de García sosteniendo que se guio “por el currículum político y vital y no en el digital”, aunque dijo ser “consciente del malestar provocado” por dichos comentarios.

Isabel García tan sólo se limitó a disculparse poco después de ser nombrada directora del Instituto de las Mujeres por si alguno de sus “comentarios personales” durante el debate previo a la tramitación de la Ley Trans “hubieran podido causar alguna ofensa”.

Ahora, conocido este supuesto caso de corrupción, la Federación Plataforma por los Derechos Trans vuelve a pedir a través de la red social X la destitución inmediata de Isabel García, pero señalando que la transfobia de la directora es más grave que la corrupción. En base a este mismo argumento, la exministra de Igualdad, Irene Montero, ha pedido también mediante su cuenta de X el cese de García.