Régimen de guerra

Quién es Javier Colomina, el nuevo representante especial de la Alianza para la Vecindad Sur de la OTAN

Nombrado por Stoltenberg a escasos meses de finalizar su mandato, la elección no ha gustado nada al Gobierno de Meloni

Javier Colomina 
Carlos Luján / Europa Press
Javier Colomina — Carlos Luján / Europa Press

El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, ha nombrado este martes al diplomático español Javier Colomina como el nuevo representante especial de la Alianza para la Vecindad Sur, ocupándose de las regiones de Oriente Medio, el norte de África y el Sahel. Un nombramiento que desde el Gobierno de Pedro Sánchez han celebrado, mientras que el de Meloni lo ha tachado de “traición”.

¿Quién es Javier Colomina?

Javier Colomina es desde 2021 el subsecretario general adjunto para Asuntos Políticos y Política de Seguridad dentro de la OTAN, además de haber ejercido como representante especial del secretario general de la OTAN para el Cáucaso y Asia Central. Antes de ello, Colomina ya trabajó desde 2017 hasta 2021 como Representante Permanente Adjunto de Delegación de España ante la OTAN.

Comenzó su carrera de diplomático en 2001 y estuvo en la Dirección de Derechos Humanos y la Dirección de Organismos Europeos del Ministerio de Asuntos Exteriores. Luego fue primer secretario de la Misión de España ante la ONU en Nueva York entre 2002 y 2006, jefe adjunto de Misión en la Embajada de España en Damasco (Siria) entre 2006 y 2008, así como consejero político en la Embajada de España en Buenos Aires (Argentina) entre 2008 y 2011. Además, también ha sido asesor superior para asuntos multilaterales y seguridad del secretario de Estado de Asuntos Exteriores entre 2011 y 2014, durante el gobierno de Mariano Rajoy.

Ahora, Stoltenberg, quien dejará su puesto en octubre, ha querido atar el nombramiento de Colomina antes de marcharse. Su elección es parte del plan de acción para el flanco sur aprobado hace tan solo unas semanas en la cumbre de la OTAN celebrada en Washington, marcada entre otras cuestiones por el objetivo de incrementar el gasto militar.

Jens Stoltenberg ha asegurado que el nombramiento del Colomina “fortalecerá aún más la importante labor de la OTAN en el Sur” —sin especificar cuál es esta— y defendiendo que el español “tiene una amplia experiencia en el trato con los socios de la OTAN”.

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En sus redes sociales, Colomina muestra su trabajo sobre todo en las negociaciones entre Armenia y Azerbaiyán, así como el apoyo continuo a Ucrania, afirmando que la OTAN apoyará al país “durante el tiempo necesario”. También mostró su apoyo a través de un retweet a Israel tras los ataques de Hamás del 7 de octubre, aunque no se ha pronunciado sobre el genocidio en Palestina.

España lo celebra e Italia lo tilda de “traición”

Desde el Gobierno de España han aplaudido el nombramiento de Colomina. El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, lo ha celebrado y ha querido recalcar a través de su cuenta de X que “España ha liderado la presencia del flanco sur en el Concepto Estratégico”, y que el país tiene “el mayor compromiso y cooperación de la Alianza con la región”.

Pero al Gobierno de Italia este nombramiento no le ha gustado nada ya que trataron de que el puesto fuera para un italiano. Tal era el interés que según el diario italiano ‘Il Fogli’, Marco Peronaci, embajador de Italia ante la OTAN, envió una carta a Stoltenberg para trasladar el malestar del Gobierno de su país, calificando el nombramiento como “sorpresa y decepción” porque creen que “para ser eficaz, la política de la OTAN en el sur necesita un enfoque renovado, no de un ‘rebranding’”. Además, también han echado en cara que Stoltenberg haya tomado esta decisión a escasos meses de finalizar su mandato y sin “una adecuada consulta de los aliados”.

Hace unos días, cuando ya se conocía la noticia pero no era oficial, el propio ministro italiano de Defensa, Guido Crosetto, aseguró en una entrevista que este nombramiento era una “traición”. Según el ministro, el todavía secretario general no quería nombrar a un representante para el flanco sur como finalmente se acordó en la cumbre y que se incluyó en la resolución porque así lo quería Italia. Por ello, Stoltenberg se habría “vengado” otorgándole el puesto “a un español funcionario que ya tiene otro trabajo”, de forma que cree que se vacía “el objetivo político que Italia buscaba y se aprobó en la cumbre”, añadiendo que Stoltenberg terminó su mandato tras nueve años al frente de la OTAN “de la peor manera posible”.