Juan Chueca, víctima del franquismo, identificado gracias a la labor de la Asociación de Familiares y Amigos de los Asesinados y Enterrados en Magallón

Este lunes, Pilar Gimeno, presidenta de la Asociación de Familiares y Amigos de los Asesinados y Enterrados en Magallón —AFAAEM—, fue entrevistada en el programa "Aquí y Ahora" de Aragón TV, presentado por Blanca Liso. Durante la emotiva y significativa entrevista, Gimeno habló sobre el reciente avance de la asociación: la identificación de los restos de 17 víctimas de la Guerra Civil española, provenientes de cinco pueblos distintos. Pilar Gimeno destacó los detalles de este logro, subrayando el compromiso y la persistencia que han caracterizado este proceso.

El esfuerzo por identificar a las víctimas se originó a partir de la colaboración con los familiares y la comunidad local. "Este trabajo que hacemos los memorialistas es a base de machacar y machacar, investigar, buscar", explicó Gimeno. La investigación se centró inicialmente en Juan Chueca, una víctima cuya historia personal ilustró el dolor y la esperanza de muchas familias.

La conexión clave para identificar a Chueca se produjo a través de Paola, la esposa de un primo de Pilar Gimeno, quien trabaja en el ayuntamiento. "Le dije, hay una persona de Magallón y me es imposible dar con los datos. Y me dijo, espérate, que le pregunto a mi madre, que creo que puede ser un familiar nuestro", recordó Gimeno. Este tipo de colaboraciones personales fue fundamental para avanzar en la identificación.

La confirmación de los restos de Juan Chueca, y la posterior notificación a sus descendientes, tuvo un profundo impacto emocional. "La emoción de su padre fue inmensa, porque ya no creía que iba a rescatar a su padre", contó Gimeno. Aunque el padre de Chueca falleció antes de que se completara la identificación, fue consciente de que los restos de su padre serían dignificados, lo que le brindó una gran satisfacción en sus últimos días.

La importancia de este trabajo va más allá de la identificación de los restos; se trata de dignificar a las víctimas y cerrar el círculo de dolor que sus familias han soportado durante décadas. "Por lo menos se ha ido sabiendo que su padre se iba a identificar, se le dignificaría y se le pondría nombre y apellidos a los huesos, que es lo que siempre pretendemos los memorialistas", subrayó Gimeno.

Una vez identificados, los restos estarán donde decidan las familias. Pilar Gimeno expresó su deseo personal de que los restos sean llevados al panteón de Magallón, un lugar significativo donde ya reposan otras víctimas desde la exhumación de 2009. "Me gustaría que viniesen a casa", dijo Gimeno, refiriéndose a Magallón como el lugar donde estas víctimas deberían descansar finalmente.

Gimeno destacó la importancia de la Ley de Memoria Democrática de Aragón, que asegura que ninguna víctima quede fuera del reconocimiento y dignificación. Criticó la imposición de la "concordia" durante la dictadura, subrayando que las víctimas republicanas han soportado décadas de humillación y silencio, mientras que las víctimas del otro bando fueron debidamente reconocidas y compensadas. "Más concordia que es vivir al lado de los asesinos de tu hijo, o de tu hermano, o de tu padre, y no poder llorar ni poder decir nada durante 40 años, esa concordia es impuesta", afirmó Gimeno.

AFAAEM continúa trabajando incansablemente para identificar y dignificar a todas las víctimas de la Guerra Civil. La colaboración con expertos como el arqueólogo historiador Nacho Piedracita y la antropóloga forense Lourdes Herrasti ha sido crucial en este proceso. "Investigando y investigando hemos descubierto que hay víctimas de Trasobares, de Bulbuente, de Fuentejalón, de Borja y 10 de Magallón", detalló Gimeno.

La entrevista concluyó con un sincero agradecimiento de Pilar Gimeno por la oportunidad de compartir el trabajo de AFAAEM y la esperanza de que más familias puedan encontrar paz.